Educación en una democracia desgarrada
Defiendo a la educación como proyecto ético, como un proyecto que provoca la transformación personal de los valores éticos e intelectuales de los seres humanos. Este libro surge del desasosiego y la esperanza sobria que aún conservo. La educación ha sido decisiva en mi vida personal y profesional. En las sacudidas más intensas, la educación me ha sostenido como fuerza recia que impide un naufragio. Me ha provisto de una forma de mirar y resistir. Me ha permitido vivir.